Niños que son hombres

Hay veces que un jugador se delata delante de los espectadores como un torbellino, como un prodigio fuera de toda duda. Nikola Mirotic es uno de esos casos y estos días con la selección española Sub 20 lo está demostrando con descollantes actuaciones en Bilbao, en el Campeonato de Europa.
Ante Ucrania el jugador del Real Madrid anotó 41 puntos y cogió 16 rebotes, ante Alamenia, 22 puntos y 12 rebotes. Inconmensurable. Claro, que a la selección de Juan Antonio Orenga le ha sonreido la fortuna en forma de una generación apasionante e irrepetible.
Mirtotic destaca sobre manera pero Franch, Tomas, Sastre, Simeón le secundan en importancia. Todos con minutos ACB, algo que no pasaba hace tiempo en una selección sub 20 donde lo normal es que ningún jugador, o pocos, tengan experiencia en la liga doméstica. Pero Mirotic es como ver a un extraterrestre. El otro día alguien en una tertulia periodística lo definía como “un hombre jugando contra niños”. Son todos niños, pero Mirotic ya ha sido drafteado por la NBA y eso no es moco de pavo. El mismo caso es el del lituano Valenciunas que hace semana y media, en la final del Mundial Sub 19, hizo para su pais 36 puntos y 17 rebotes. Pues lo mismo. El chico, elegido este año en el número 5 del Draft NBA, es una máquina en potencia. Los dos se meriendan a su rivales aún teniendo la misma edad que ellos.
Y pensando en el Real Madrid que va a diseñar Pablo Laso, uno empieza a pensar que, quizá, no sean determinantes tantos fichajes. Para empezar, Laso ya le ha dicho a Velickovic que va a tener una importancia básica en su Real Madrid. Contando con que Mirotic ya es una realidad, estos dos jugadores parecen dos fichajes estrella para los blancos. Uno no tuvo casi minutos el año pasado y el otro, los tuvo, pero estaba empezando. Los dos comienzan este curso con energías renovadas.
No sabemos lo que durará lo de Mirotic, un auténtico crack, futuro NBA. El Real Madrid haría bien en sacarle todo el partido posible este año, Si no, se arrepentirán. No todos los días tienes a una estrella emergente en tu equipo. Y no sólo un proyecto, si no un tipo que ya ha demostrado que puede con la ACB. Vaya joya.