Al tratarse de un equipo grande,
el de más historia del basket español, se tendría que hacer mirar el Madrid lo
de irse de los partidos, el estar apático durante casi treinta minutos, para
remontar y demostrar la clase que tienen justo en el último cuarto. Simplemente
porque algunas veces sale bien, ayer en Canarias remontando doce puntos en dos
minutos y medio, y otras sale mal, como el viernes en Moscú, para perder en
Euroliga.
Ya
sé que no es controlable, que los partidos se juegan en el momento y que,
evidentemente, el equipo de Laso y el propio entrenador no son conscientes de
ello en ese instante, pero al pasarte dos veces en dos días sí que es
entrenable, y tiene que ser, por obligación, mejorable. Porque da la sensación
de que el Madrid, concentrado, hubiera ganado los dos partidos de calle, pero
perdió uno y ganó por los pelos el otro. Eso sí, esta última remontada
perdiendo a 2.34 por doce puntos (82 – 70) entra dentro de los anales de la
ACB, parecida a la de Vitoria en 2005 que le valió la Liga, y hace que el grupo
de Laso sea lider de la competición.
Dejando
el Madrid a un lado es obligado reconocer en esta jornada de reflexión de todos
los lunes que el Valencia basket de Perasovic tiene una pinta bárbara. La tiene
por plantilla a pesar de perder a De Colo y a Claver, pero la tiene sobre todo
por el entrenador que hay en la banda, un ganador, un croata de carácter, un
tipo que sabe a qué juega y al que le preceden las semifinales del año pasado.
Los levantinos están invictos y darán que hablar en esta Liga.
Como
lo harán Unicaja, Caja Laboral y Estudiantes. Los dos primeros ganaron y están
al acecho de los líderes de la Liga. Estudiantes perdió pero por un punto en
Bilbao, cancha de la que saldrán pocos ganadores (si sale alguno). Los del
Ramiro estaban invictos y ponen el primer borrón de la temporada, pero
justificable al máximo. Pinta de que este año sí que es el del equipo colegial.
Unicaja
y Caja Laboral van a lo suyo. Sin hacer ruido pero ganando. Los malagueños se
han hecho ya a Repesa y cosechan tres triunfos consecutivos, el último en
Fuenlabrada donde todo huele muy mal. Problemas con los patrocinadores y equipo
que no acaba de cuajar hace que los madrileños sean, este año, candidatos al
descenso y sufrirán si quieren quedarse.
Buena
pinta tiene, otro año más, Caja Laboral. A pesar de perder a Prigioni y a
Teletovic. Ganaron al Joventut con muchísima amplitud y sólo tienen el lunar de
Zaragoza de la primera jornada donde cayeron por 13 puntos en una mala mañana.
Se han complicado la vida en Euroliga pero yo a un grupo liderado por Ivanovic
nunca le daría por muerto. Nunca.
Me
sorprenden Blancos de Rueda y Blusens, sensaciones en estas jornadas. Los
vallisoletanos ganaron ayer el segundo partido del año y aguantan el tirón entre
los grandes. Los gallegos perdieron por cuatro tan sólo en cancha de Valencia y
suman su primera derrota. Gran trabajo el de Moncho Fernández en Santiago.
Equipo a tener en cuenta para ser la revelación.
Y luego, para terminar, está el Barça de
Pascual. Levantando pasiones y odios. Pero no hay medias tintas con este
equipo. O te gusta o le aborreces, o te encanta el basket control y granítico,
o desenchufas el televisor, preso de un ataque de nervios. Sabéis que yo soy de
los primeros pero tengo cerca a gente que son de los segundos. Se puede
convivir con ellos. Tengo que decir que hay respeto mutuo. Se trata de entender
los argumentos del contrario. Ellos lo hacen conmigo. Yo, con ellos.
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