Se reparte un título en Madrid de hoy al domingo y el favoritismo se le ha desplumado al Tau a las primeras de cambio. Es cierto que es el mejor equipo, pero juntando los tópicos de la Copa en la que puede suceder de todo y que el equipo baskonista se dejó el sábado en Vistalegre parte de su labrado buen hacer con una remontada en contra de las que hacen época, no es menos cierto que nos encontramos de nuevo con una Copa sin claro número uno. Sin ir más lejos el año pasado el equipo que entonces dirigía Spahija (hoy rival en el primer envite del Tau) era mucho más favorito jugando en Vitoria y perdió la final ante el DKV de Aito.
Hoy todo empieza para el grupo de Ivanovic ante el Pamesa de su ex entrenador (21.30, Autonómicas) y es la primera gran prueba para los corazones de los aficionados vascos, trasladados en masa a la capital. El equipo valenciano tiene la oportunidad de vencer en lo que sería la primera gran sorpresa del torneo.
Antes, habrán saltado a la pista Madrid y Barça (19.00, TVE) en el clásico que se repite por decimocuarta vez en una Copa. Antes, once victorias catalanas (incluidas tres finales, 1988, 2001 y 2007 y dos sólo blancas, una en la final de 1989 y la última, justo hace tres años también en Madrid y también en cuartos de final.
Para este nuevo clásico del basket español se juntan varios condicionantes que pueden ser decisivos. En el Madrid ha vuelto milagrosamente Raúl López, pero no estará al cien por cien en toda la competición y será algo fiable si el equipo de Plaza pasa de esta ronda. En el Barça no está Lakovic pero el club catalán no se ha resentido sin el esloveno en cancha.
Joan Plaza ha asegurado que le haría más ilusión ganar este trofeo que el de la Liga en 2007, cosa que ha sorprendido a propios y extraños. Claro que el equipo blanco hace que no levanta esta copa el mismo tiempo que la sección de fútbol. 16 años.
Para el viernes quedan el Unicaja - Kalise y el Estudiantes - Joventut. Para el enfrentamiento entre malagueños y canarios también se ha venido abajo el cartel de favorito que tenía sin duda el conjunto de Aito. Ahora están empatados en ACB y muy poca gente calificaría de sorpresa una victoria isleña (que sería la primera en una Copa del Rey) en un cruce que ya se produjo en 2006 con victoria andaluza.
Estudiantes para muchos es el gran tapado de la competición. Juegan en casa o casi porque la afición va a ser mucha y se ha sorteado, al menos, el lado oscuro del cuadro final. En la plantilla un ganador de la Copa el año pasado, Popovic con el Joventut, rival el viernes y en el banquillo un hombre, Luis Casimiro, que siempre pasó los cuartos, una vez con Manresa y dos con Pamesa.
A partir de hoy arranca el torneo más atractivo del basket, una competición que te exige tres días de concentración perfecta. Un torneo proclive a las sorpresas, al gafe del anfitrión (sólo el Tau ganó de local en 25 años) y muy poco propicio para repetición de título. Desde que lo hizo el Barça (1987 y 1988) nadie ha osado en ganar dos veces seguidas. Por algo será.
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